El pasado fin de semana, el Pabellón Javier Imbroda de Melilla acogía un nuevo encuentro de la Adecco Oro bajo el arbitraje de Susana Gómez. Muchos se sorprenden aun cuando ven a esta joven murciana pitando con firmeza y autoridad sobre la cancha pero lo cierto es que la trayectoria de Susana en el mundo del arbitraje es tan extensa como exitosa.

Corría la temporada 1992/93 cuando con apenas 17 años Susana Gómez López superaba el curso de arbitraje a la par que compatibilizando dicha labor con la práctica activa del baloncesto como jugadora; un total de 4 temporadas, como cadete primero y en categoría autonómica después (1ª y 2ª).

Con el paso de los años, la deportista abandonó las canchas como jugadora para pasar a compatibilizar el arbitraje con su profesión como profesora de inglés. Ha sido precisamente en estos últimos años cuando ha conseguido grandes logros como la participación en el Campus FIBA de Eslovenia 2009 siendo nombrada mejor árbitro, o su nombramiento para arbitrar el encuentro que enfrentó a la Selección Española ante Israel en Murcia el pasado mes de Agosto como preparación para el Mundial Masculino de Turquía.

Además, Susana es una habitual tanto de las Ligas Adecco como de la Liga Femenina donde el pasado curso arbitró la Supercopa Femenina o la final de la Copa de la Reina entre el Ros Casares y el Perfumerías Avenida. Pero el premio gordo ha llegado durante la presente temporada ya que en las últimas semanas ha obtenido la licencia internacional que la permitirá desarrollar su labor más allá de nuestras fronteras.

Sin lugar a duda, todo un ejemplo de sacrificio en el mundo del arbitraje femenino.