España se quedó a un segundo de haber jugado la final del Mundial U17 Masculino de Zaragoza y Utebo. Luchará por el bronce pero habrá un representante español en ese último partido del torneo: Carlos Peruga. El árbitro aragonés era el representante español, junto a la murciana Susana Gómez, en el gran torneo de formación de este verano. Y dirigirá el Estados Unidos-Turquía de este domingo: “es un premio al trabajo realizado, pero no al de aquí. Esto viene de los primeros pasos en la Federación Aragonesa, con Chemi Sierra, cuando se trabajó conmigo; de cómo me llevaron en la Federación Española con Pedro Rocío, un apasionado del arbitraje, y de la labor de la Liga Endesa, con Paco Monjas, en la mejor competición de Europa. He tenido la suerte de tener un torneo bueno, han decidido que me toque a mí pitar la final. Y estoy orgulloso de ello” afirma Peruga.

Una nueva demostración de que el arbitraje español está en lo más alto del podio mundial. Peruga lo tiene claro: “el arbitraje español está en el mismo nivel que el baloncesto español. Aquí estamos involucrados jugadores, clubes, federaciones, entrenadores, directivos,.. y los árbitros somos una pata más de ese banco. Estoy convencido de que cualquier otro compañero también hubiera estado a un nivel parecido, y hubiera podido dirigir la final.” La clave de este nivel es, para Carlos Peruga, “el trabajo. Se trabaja mucho desde las competiciones autonómicas a las nacionales y a la Liga Endesa. Algo de materia prima tiene que haber pero hay una estructura que hace que todo sea mucho más fácil.”

Hay un aliciente doble, y es que Carlos Peruga pitará la final de un Mundial en su ciudad de nacimiento: “Había sido designado antes de que se decidiera que la sede era Zaragoza, por lo que fue una doble alegría. Zaragoza es una ciudad que respira baloncesto y aquí es donde yo empecé esa afición por el baloncesto, porque para ser árbitro es necesario querer este deporte. Así que ejercer de anfitrión con otros compañeros, o con la gente de FIBA, me llena aún más de orgullo.”

Sobre el campeonato Peruga asegura estar disfrutando de las vivencias. Para el aragonés “el baloncesto en esta etapa de eminente formación es más puro, más bonito. No es un deporte tan encorsetado, es más alocado, con más errores,… pero he visto jugadas que envidiarían ligas profesionales”. Además de las pistas Peruga está disfrutando de la convivencia fuera de ellas “es una experiencia enriquecedora. De aquí me llevo 36 amigos de los cinco continentes. 36 personas de diferentes culturas, pero con una misma pasión: el baloncesto.”

SUSANA GÓMEZ: “Es un reto trabajar con compañeros de otros continentes”

La murciana también ha representado a España en estos Mundiales U17 de Zaragoza y Utebo, una experiencia “de la que estoy encantada. Estar en un Mundial siempre es una satisfacción y más si es en España, con la gente que te quiere y que te apoya cerca.” El hecho de haber disputado a la vez el Mundial masculino y femenino también tiene sus beneficios: “estamos juntos los dos grupos de árbitros que deberíamos estar en cada sede. Por tanto, tenemos la oportunidad de poder pitar tanto masculino como femenino. Y además recibes la misma información de los mismos técnicos.”

Susana cree que “es un reto trabajar con compañeros de otros continentes. Te pasa en España, cuando diriges con gente distinta,… imagínate cuando estar con compañeros de cinco continentes diferentes. La filosofía es la misma, pero hay diferentes rutinas y niveles que intentamos homogeneizar.”

Lo que parece claro es el gran nivel del arbitraje español: “está entre los mejores del mundo. Tenemos mucho ganado pero mucho que seguir aprendiendo.”