Me encuentro en Sofía y hoy es el último día del campeonato y sólo queda una plaza por decidir para el ascenso a la división A, la cual se resolverá en el partido que disputan Portugal - Bosnia y Herzegovina, el cual arbitraré junto con Petar Denkovski (MKD) y Per-Kristian Larsen (NOR).

Las otras dos plazas de ascenso han sido conseguidas por Alemania y Hungría. Ambos equipos son los que más sólidos se han mostrado durante todo el torneo que se disputa en el sistema de todos contra todos en un grupo único de diez equipos. El nivel de juego mostrado no ha sido muy elevado, pero al menos la mayoría de los partidos han sido muy disputados.

En lo que respecta al área arbitral se está haciendo especial hincapié en trabajar de manera correcta la mecánica. La mayor parte de las reuniones de grupo fueron orientadas en este sentido además de intentar dar lo necesario al juego desplegado.

El grupo de gente que he encontrado es realmente agradable, los instructores se vuelcan en cada momento para mejorar el trabajo de cada uno y con los compañeros existe una buena relación. Lo cierto es que un campeonato de tan pocos equipos y con solo 15 árbitros, hace que la convivencia entre todos sea más estrecha y que todo se desarrolle sin ningún tipo de problemas en un ambiente serio pero distendido.